Los momentos de los cuales vamos a hablar, nos sitúan frente a la industrialización.
En aquella época la gente no iba a las sidrerías, ya que, no existían. La sidra se consumía en casa o en las tabernas, es decir, los vasos de cristal y las botellas no habían sido fabricados.
La sidra se tomaba directamente del tonel y más adelante empezamos a utilizar las jarras de madera para sacar la sidra de los toneles o pipes donde se fermentaba esta. La madera en aquella época era el principal material que encontrábamos en un llagar.
Mirando la foto adjuntada a continuación, vemos que no hay vasos de ningún tipo, eso nos diferencia de la etapa preindustrial de la industrial
Más adelante empezaron a fabricas vasos y jarras de barro, este mantenía fresca la sidra, esta debía tomarse con ese frescor que el barro nos permitía mantener. Con que el nuevo método de hacer los recipientes de barro para tomar la sidra supuso un avance.
Más adelante, se inició la técnica de la cerámica de barro. Las jarras seguían siendo de barro, pero decorándolas y haciéndolas más estéticas. Fue entonces cuando empezó a haber gente que se dedicaba a ello, fabricando las jarras y vasos de cerámica y comercializando con ellas.
Como vemos, las botellas todavía no habían llegado y es por qué no hacía falta escanciar la sidra, ya que como la sidra salía directamente del tonel no era necesario. Es decir, en la etapa preindustrial no se escanciaba todavía.
Cuando ya existen fábricas que hacen vidrio, empezaron a realizarse las botellas y los vasos de cristal.
Una vez que sucedió esto, la sidra empezó a comercializarse y a exportarse. Las botellas nos permitían hacer esto.